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Trabajo Infantil


El artículo profundiza las relaciones que se establecen entre las distintas formas que asume el trabajo infantil y las condiciones socioeconómicas estructurales en que éste se realiza. La hipótesis que orienta el trabajo establece que la actividad laboral realizada por menores, depende tanto de las características socioeconómicas
de las unidades familiares de la que forman parte los menores, como de las características específicas de la economía regional y nacional. Estas en conjunto determinan la forma, oportunidad y características del trabajo infantil.

Los estudios sociales basados en las actividades laborales que realizan los niños tienden a abordar el fenómeno desde una perspectiva histórica (Rojas, 1996;Rojas,1999) o considerarlo como una patología social, consecuencia y expresión de la explotación que sufren de los niños por parte de los adultos, entendiendo que el trabajo infantil sólo genera riesgos para el niño y la sociedad (Rojas1998;
Millán,1999). Lo anterior es entendido como una consecuencia casi natural de la temprana inserción de los niños en actividades laborales. Los estudios de Breves en Costa Rica (1994), Rocha en Brasil (1985) y el Colegio de Profesores de Chile A.G.( 2001) en Chile, muestran que los niños se incorporan al trabajo estable antes de los 11 años, el ingreso al trabajo de forma temporal se realiza por lo general a
edades aún más tempranas.


Existe, sin embargo una perspectiva poco explorada del trabajo infantil, ésta se desprende de considerar a la actividad laboral de los niños, como una expresión de la forma en que se articulan los diferentes sectores económicos en una economía dependiente, al mismo tiempo permite entender el modo en que se genera el proceso más amplio de reproducción de las unidades familiares en situación de pobreza.

El trabajo infantil así entendido, debe conducirnos a estudiar el fenómeno no sólo en relación a los efectos que la actividad laboral genera en los niños trabajadores, sino también al contexto social y económico en que tal actividad se lleva a cabo. Sobre esta premisa, el presente trabajo se aboca a describir las
relaciones que se establecen entre las distintas formas que asume el trabajo infantil y las condiciones socioeconómicas estructurales en las que el trabajo infantil se lleva a cabo.

El supuesto básico es que la actividad laboral de los menores, depende por un lado de las características socioeconómicas de las familias de las que forman parte los niños y por otro lado de las características específicas del contexto de la economía regional y nacional. Estas en conjunto determinan la forma, oportunidad y
características específicas que asume el trabajo infantil.

Los niños que trabajan son hoy, como hace años una realidad de nuestra sociedad, las tareas que realizan son diferentes, sin embargo el principio es el mismo, niños que deben trabajar de manera más o menos estable para contribuir al sostenimiento de sus grupos familiares. Diariamente están presentes y son visibles en los supermercados, calles, plazas y ferias de productos agrícolas . De manera menos visible están también al interior de sus casas complementando y sustituyendo la actividad doméstica de sus padres o de los adultos con los que viven y/o en talleres y microempresas familiares reemplazando a eventuales trabajadores salariados.

El trabajo infantil es un fenómeno de antigua data, pero que se recrea constantemente asumiendo características específicas según sea la relación que establece con otros fenómenos sociales, por esta razón sólo es posible identificarlos genéricamente en el tiempo, pero no caracterizarlo de manera única. No obstante presenta singularidades, expresadas en el bajo costo de la mano de obra para los empleadores y su relación directa con las situaciones de pobreza que afectan a las familias de los niños trabajadores (Schildkrout:1980).




1 comentarios:

  1. ¿¿como interviene el trabajador social ante esta problematica??
    gracias

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